Local terres Tarragona General	DIARI DE TARRAGONA	Pág. 3  Domingo, 30/11/2003 Autor: Redacción/Tortosa
	La interconexión de redes de agua es tan necesaria como la de redes eléctricas
	Faura cumple su primer año al frente del CAT
	[8712 Caracteres] El próximo 16 de diciembre, el abogado tortosino Valentí Faura cumplirá su primer año como presidente del Consorci d'Aigües de Tarragona (CAT), organismo integrado por Generalitat, ayuntamientos y empresas, que gestiona los recursos hídricos procedentes del minitrasvase del Ebre. Valentí Faura, que sustituyó en la presidencia al alcalde de L'Ampolla y entonces delegado del Govern en las Terres de l'Ebre, Francesc Sancho, realiza un balance de su primer año de gestión al frente del CAT en esta entrevista concedida al Diari. Faura también ocupa actualmente la presidencia de la Cambra de Comerç de Tortosa. ¿Qué balance hace de este primer año de presidencia? El balance, en principio, parece positivo, aunque realmente esta pregunta deberían contestarla los propios consorciados, beneficiarios del agua que reciben. El agua es un bien primordial e imprescindible, y por consiguiente el que el suministro sea constante y se vele por la calidad del agua son objetivos prioritarios del CAT. En este sentido hemos implantado un analizador de mercurio que nos permite diariamente tener los resultados de este parámetro en el agua cruda y en el agua salida de la planta. Vamos asimismo a potenciar en pocas semanas el laboratorio existente en la planta de L Ampolla. El compromiso con la calidad nos ha llevado a implantar y a obtener con éxito durante estos meses la certificación de calidad ISO 14001:1996 en la aplicación de un sistema de gestión medioambiental para las actividades de captación, tratamiento y distribución de agua. También hemos obtenido la certificación ISO 9001, que acredita la existencia de un sistema de calidad y un proceso de mejora continuo. Y estamos en posesión, asimismo, de la certificación de gestión de Software original GSO.0003/2003. Siendo tortosino y presidente de este organismo, ¿está a favor de los trasvases? ¿Qué opina de la prolongación del minitrasvase a Barcelona? Mi posición respecto al trasvase del Ebre (más que respecto al PHN o a otros trasvases) ha sido siempre contraria a su realización, entre otras razones porque es difícil extraer agua del Ebre cuando su caudal es tan mínimo que no alcanza a realizar las mínimas funciones ecológicas y medioambientales, máxime cuando hay además soluciones alternativas, y sin entrar a cuestionar el destino del agua trasvasada. No es suficiente la aplicación de esta denominada cultura del agua , entendida como sinónimo de buena educación en relación al consumo y su aprovechamiento; la práctica de esta educación (que aún no se lleva a la práctica) no resolverá a medio plazo (y mucho menos a largo plazo) por sí misma la escasez de agua. La racionalización del consumo puede aliviar pero no solucionar el problema. Un crudo ejemplo lo hemos tenido en el Camp de Tarragona, cuando hace unos cuantos años en Reus (y también en otras ciudades) se aplicó esta nueva cultura del agua, racionándola e incluso restringiéndola periódicamente (había días en que en muchos domicilios llenaban las bañeras de un agua amarronada para el consumo mas perentorio del día siguiente), problema que no se resolvió hasta la llegada de los efectos de la Ley 18/81. Hay, no obstante, alternativas válidas. Por un lado, las cuencas catalanas podrían solucionar su problema con el trasvase del Ródano a Catalunya. Por otro lado, las nuevas tecnologías hacen adelantar mucho la posibilidad de instalaciones de tratamiento de agua marina. Actualmente, los costos del agua que se obtendría de una desalinizadora para unos caudales anuales de 20 hm3 (incluyendo la amortización de sus instalaciones, que tendría un presupuesto de instalaciones de unos 53 millones de euros) estaría alrededor de 0,519 euros/m3, bajando esta cifra a 0,453 euros/hm3 si el caudal fuera de 40 hm3. ¿Ha presentado el CAT alegaciones al proyecto de interconexión de redes? El Consorcio no ha presentado alegaciones al citado proyecto, ya que es uno de sus protagonistas. La interconexión de redes de agua es tan necesaria o más de lo que lo puede ser la interconexión de carreteras o de redes eléctricas. Pensar que en un momento determinado, por cualquier circunstancia extraordinaria (muy difícil pero posible), no pudiera llegar el abastecimiento de agua habitual del Ebre a la red nos produce una grandísima preocupación, que se ve totalmente mitigada con esta posibilidad de poder ser receptores de agua de otro origen, y más en los meses de julio y agosto, cuando la demanda se acentúa extraordinariamente. ¿Cuándo se potenciará la sede en les Terres de l Ebre? ¿Qué pasará con la sede de Reus? Y si finalmente se mantienen las dos sedes, una en el Camp de Tarragona y otra en las Terres de l Ebre, ¿cómo se repartirán las funciones o competencias? El CAT en las Terres de l Ebre ya tiene sede. Tiene su domicilio social por mandato estatutario en Tortosa y está ubicado en la calle Santa Anna, donde tiene una oficina que alberga aunque no frecuentemente los consejos de administración. También en las Terres de l Ebre, en la planta de L Ampolla, además de la planta de tratamiento del agua y la estación depuradora, está también la sede administrativa de la entidad, de tal manera que aproximadamente la mitad de la plantilla de la entidad trabaja en esta planta y es de las Terres de l Ebre. Desde que accedí a la presidencia, muchos consejos de administración y todas las asambleas generales (máximo órgano de gobierno de la entidad, compuesto por todos los consorciados) se han celebrado en las Terres de l Ebre. Evidentemente, en la autovía de Reus a Tarragona el CAT tiene otra importante planta en donde radican buena parte de las instalaciones, donde trabaja la otra mitad de la plantilla, y tiene otro importante centro administrativo donde se reúnen también con mucha frecuencia los consejos de administración de la entidad. Por consiguiente, no hay incompatibilidad con la existencia de dos centros, uno en el Camp de Tarragona y otro en las Terres de l Ebre. ¿Qué municipios del Camp y del Ebre forman parte de la red del CAT? ¿Van a entrar más poblaciones en la red? Los municipios de las Terres de l Ebre que forman parte del CAT son: L Ampolla, L Ametlla de Mar, Amposta, L Aldea, Camarles, Deltebre, El Perelló, Sant Carles de la Ràpita, Sant Jaume d Enveja y Alcanar. En cuanto a los del Camp de Tarragona, son: Almoster, L Albiol, Altafulla, Cambrils, Castellvell, El Catllar, Constantí, Els Garidells, Maspujols, Mont-roig, El Morell, Els Pallaresos, Perafort, La Pobla de Mafumet, Reus, Riudoms, Roda de Barà, Salou, La Selva del Camp, Tarragona, Torredembarra, Vallmoll, Valls, Vandellòs i L'Hospitalet de l Infant, Vilallonga, Vinyols i els Arcs, El Pla de Santa Maria, Alió, Montbrió del Camp, Cabra del Camp, Vilaplana, L Aleixar, Les Borges del Camp, Alforja, Puigpelat, El Rourell, La Pobla de Montornès, El Milà, Nulles y Rodonyà. Estar consorciado con el CAT supone para estos municipios e industrias la tranquilidad de tener constantemente el suministro de agua de la concesión que tiene pedida y otorgada. Actualmente no hay solicitudes de nuevas incorporaciones pendientes de aprobación, aunque prácticamente todos los consejos de administración atienden nuevas solicitudes o la ampliación de las existentes. ¿Cuáles han sido las inversiones realizadas bajo su presidencia? Las inversiones durante el año 2003 representan un total de 7,8 millones de euros, y básicamente las podemos englobar en tres grupos: obras nuevas, mejoras de las instalaciones existentes y finalización de las obras iniciadas en el año anterior. Estas inversiones se distribuyen por todo el ámbito de actuación del CAT, y son de destacar: el ramal a L'Hospitalet de l Infant, el ramal a Les Cases d Alcanar, la duplicación del ramal de La Selva del Camp, la duplicación del ramal del Alt Camp, el ramal a Sant Carles de la Ràpita y a Alcanar, y las mejoras en la planta de tratamiento de L Ampolla, entre otras. ¿Qué está haciendo el CAT para controlar los vertidos de mercurio? El CAT realiza todas las analíticas, según el Real Decreto 140/2003 de 7 de febrero, de criterios sanitarios de calidad del agua de consumo humano. La reglamentación prevé los puntos del muestrario, la frecuencia de los mismos y los parámetros a analizar. Y concretamente, por lo que se refiere al mercurio, en la planta de tratamiento de L'Ampolla hemos instalado un analizador que permite controlar diariamente este parámetro. Estas analíticas permiten minimizar los riesgos por posibles contaminaciones, ya que si se detecta presencia de mercurio en la red, rápidamente se corta el agua de la captación y ya no se contamina la planta de tratamiento. La misma analítica permitirá determinar en tiempo real el momento en que se puede de nuevo coger el agua.